Pinyol a la izquierda de la foto con su nueva compañera :D y por lo visto hacen los dos lo mismo, ladrar a otros perros sin tener conciencia de su tamaño, tal para cual! Gracias a Adri Maldonado y familia por cuidarlo tambien durante su leishmania, mimarlo y recuperarlo para su adopción, el trabajo de una casa de acogida es duro, pero compensa ver que puedes ayudar a muchos peludos.