Nos cuenta la adoptante de Cleo, que a pesar de sus problemillas de salud, ya le han encontrado una comida renal que la vuelve loca, que cada vez que oye la puerta de la nevera sale corriendo y se sienta delante esperando a ver que pilla. Le están dando medicación que toma muy bien y controlan que beba mucho agua y haga sus correspondientes pipis.
Le han comprando un peine y se ha acostumbrado a ser cepillada cada dia sin rechistar, con lo cual su pelo está brillante, ya conoce la casa y se mueve con libertad, incluso se ha animado a jugar con el rascador de uñas, además se está volviendo pegajosilla con la mamá, si ve que no le hacen caso por que hablan por telefono o están ocupados haciendo cosas de casa, se frota en sus piernas y se les sube encima para llamar la atención. Cada mañana cuando se levantan juegan un rato y el juego consiste en hacer cuevas con las mantas de la cama, Cleo se esconde y luego aparece saltando hacia su mamá. Le queda pasar por el veterinario de nuevo en unos dias para comprobar que todo va bien, pero con las cosas que cuenta seguro que es asi.
