Marisa ha adoptado a Nico, nos cuenta que cada dia salen a correr juntos y que se adapta muy bien, lo que cuesta mas es que se siente tranquilito y que deje de dar saltos como una cabrita, pero ella entiende que es por que se siente feliz, asi que poco a poco a medida que se de cuenta que su adopción es un hecho y que ese sillón ya no se lo quita nadie, seguro que se relaja.